Centro Independiente de Informacion Nacional

viernes, 20 de julio de 2007

IMAGENES DE LA CONFERENCIA DE LAS VIUDAS, FAMILIARES Y RESCATISTAS DE LOS COMPAÑEROS MINEROS SEPULTADOS EN LA MINA PASTA DE CONCHOS, COAHUILA.










ACUERDOS A LOS QUE LLEGARON LAS VIUDAS, FAMILIARES Y RESCATISTAS DE LOS COMPAÑEROS MINEROS SEPULTADOS EN LA MINA PASTA DE CONCHOS, COAHUILA.

Reunión celebrada el día de 19 de julio de 2007 con los familiares de los mineros fallecidos en la Mina Pasta de Conchos, me permito reiterarle los acuerdos asumidos por el Grupo Parlamentario del PRD.


 

Presentar ante la Junta de Coordinación Política, el Informe de la Comisión Especial para conocer las Responsabilidades y Origen de la Mina Pasta de Conchos de esta H. Cámara de Diputados.


 

Realizar acciones de difusión y publicación del Informe de mérito.


 

Exhortar al Senado para que se ratifique el Convenio No. 176 de la OIT, relativo a la Seguridad y Salud en las Minas.


 

Solicitar a expertos, tanto nacionales como internacionales, ya sea de la UNAM, IPN, OIT, ONU y OEA para que elaboren un dictamen alterno e independiente, a fin de comprobar el dicho de la autoridad, respecto a la posibilidad de rescatar los cuerpos de los mineros fallecidos. Además de conocer los hechos que provocaron el siniestro.


 

Lo anterior en coordinación con la Comisión Nacional de Derechos Humanos.


 

Establecer una reunión con el Gobernador de Coahuila Humberto Moreira y con el Lic. Jesús Torres, Procurador General de Justicia del Estado a fin de conocer la legalidad de las actuaciones ministeriales en torno a las periciales que determinen la posibilidad del rescate de los cuerpos así como la protección del lugar de los hechos.


 

Solicitar la comparecencia del Lic. Javier Lozano, Secretario del Trabajo y Previsión Social; Dr. Eduardo Sojo. Secretario de Economía; Lic. Germán Martínez, Secretario de la Función Pública.


 

Además de la Secretaria de Energía, Dra. Georgina Kessel y del Director General de Minas, Ing. Juan Antonio Calzada Castro.


 

Presentar las iniciativas de ley que se mencionan en el Informe de la Comisión Especial para conocer las Responsabilidades y Origen de la Mina Pasta de Conchos de esta H. Cámara de Diputados.


 

Analizar la posibilidad de solicitar la intervención de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, para efecto de que analice las contradicciones de interpretación respecto al artículo 55 de la Ley Minera, toda vez que la respuesta que dio la Secretaria de Economía a la Sra. Elvira Martínez, difiere a la interpretación que a su vez realizó la Comisión Especial para conocer las Responsabilidades y Origen de la Mina Pasta de Conchos de esta H. Cámara de Diputados del citado artículo.


 



 



 



 



 



 



 



 

jueves, 19 de julio de 2007

SIN MAÍZ NO HAY PAÍS.

¡Pon a México en tu boca!


 

CAMPAÑA NACIONAL EN DEFENSA DE LA SOBERANÍA ALIMENTARIA Y LA REACTIVACIÓN DEL CAMPO MEXICANO


 

CONVOCATORIA

A TODOS Y TODAS


 

Considerando que:


 

A partir de 1982 se impulso en México un modelo de agricultura y alimentación basado en la privatización, la apertura comercial indiscriminada y la desregulación del sector agroalimentario. Con la contrareforma salinista del articulo 27 constitucional en 1992 se pretendió impulsar la privatización de las tierras ejidales y comunales e iniciar, de hecho, un muevo proceso de "desamortización" de los territorios en manos campesinas e indias y un verdadero proceso de deportación de la población rural "excedente", "sobrante", "improductiva".

Dicho modelo de dependencia alimentaria, monopolización del mercado agroalimentario y descampesinización compulsiva fue profundizado y elevado a rango de ley suprema de la nación y política de Estado con la aprobación y puesta en marcha del TLCAN en 1994.

Después de más de 25 años de sufrir una verdadera guerra contra la economía campesina y la población rural, el campo no aguanta más.

La inseguridad alimentaria en la que ha sumido el país es una realidad cotidiana y pronto será una verdadera pesadilla: la crisis de los precios de la tortilla y sus impactos negativos de la economía popular así lo comprueban.

El hambre y la malnutrición son una realidad inaceptable en México a más un siglo de la Revolución mexicana. El hambre no espera.

El maíz, base de nuestra alimentación y riqueza cultural, está en grave riesgo: la apertura de las fronteras a maíz y frijol importados prevista por el TLC para el primero de enero del 2008, la pretensión de sembrar maíces transgénicos en México; la falta de control sobre los monopolios agroindustriales y el alza a la demanda de maíz en Estados Unidos para fabricar etanol amenazan la calidad, la cantidad y el precio de los maíces que nos llevamos a la boca y de todos los alimentos que dependen del maíz.

Si no logramos conservar e impulsar la producción mexicana de maíces blancos, rojos y azules, base de la vida campesina e indígena y elemento indispensable de la cocina mexicana, nos veremos forzados a comer maíz transgénico amarillo, principalmente usado como alimento de animales, y tendremos que pagar por dichos alimentos básicos, el precio que decidan los monopolios agroalimentarios transnacionales.

El sueño neoliberal de un campo sin campesinos ni indios en México no es más que una pesadilla y vana ilusión. O hay México con campesinos y pueblos indios, o no hay México. Porque sin maíz no hay país.

Las organizaciones campesinas e indígenas, ambientalistas, de derechos humanos, de consumidores, no gubernamentales, investigadores, científicos, artistas intelectuales y ciudadanos de a pié, elevamos voces para llamar a la sociedad civil a emprender la defensa de nuestro derecho a la alimentación, del derecho campesino e indígena a existir con sus culturas y formas de vida propias; a establecer políticas agrícolas que fomenten la producción nacional de la amplísima diversidad de maíces mexicanos. Hemos alertado sobre el riesgo real de la contaminación con transgénicos de nuestros maíces, así como el arrasamiento de la producción campesina con maíz importado de baja calidad y alto precio.

Esta es la hora en que la sociedad civil, todos los mexicanos, en cualquier parte del mundo, levantemos nuestras voces para defender al maíz, que es defender nuestra alimentación, nuestra soberanía y nuestras libertades.


 

Porque sin maíz no hay país, pon a México en tu boca.


 

Llamemos a todos los mexicanos para que desde donde estén y con ingenio se expresen a favor de la protección del maíz mexicano, por la soberanía alimentaria y la reactivación del campo mexicano, apoyando estas:


 

Diez medidas urgentes:


 

Sacar al maíz y al frijol del TLCAN.- Instalar un mecanismo permanente de administración de las importaciones y exportaciones de maíz y frijol (y sus derivados y subproductos) por el Congreso de la Unión.

Prohibir la siembra de maíz transgénico en México.- Protección y mejoramiento del patrimonio genético de los maíces mexicanos, incentivo a la producción de maíces nativos y orgánica.

Aprobar el Derecho Constitucional a la Alimentación por la Cámara de Diputados y la Ley de Planeación para la Soberanía y Seguridad Agroalimentaria y Nutricional por la Cámara de Senadores.

Luchar contra los monopolios del sector agroalimentario: Evitar el acaparamiento y la especulación así como la publicidad engañosa de alimentos "chatarra".

Promover que el maíz mexicano y las expresiones culturales que involucra se inscriban tan pronto como sea posible en la lista de Patrimonio Oral e intangible de la Humanidad, por la UNESCO.

Control de precios de la canasta alimentaria básica, garantizar el abasto y crear una reserva estratégica de alimentos. Promover el consumo de alimentos campesinos, y el comercio justo.

Reconocer los derechos de los Pueblos originarios y proteger los territorios campesinos y sus recursos naturales estratégicos.

Apoyar que más productores de café accedan a los mercados internacionales de mayores precios.

Impulsar la conservación de los bosques y selvas mediante el manejo sustentable de los recursos naturales a través de la organización y gestión comunitaria.

Garantizar el principio de equidad de género en las políticas rurales, así como el reconocimiento pleno de los derechos humanos, ciudadanos y laborales de los jornaleros agrícolas y los trabajadores migrantes.


 

¿Cómo participar?


 

A
partir del 25 de junio del 2007 y hasta el 1º de enero del 2008 llamamos a todos los mexicanos y mexicanas a:


 

Sembrar maíz en hogares, banquetas, camellones y parques públicos por todo el país.

Apoyar con su firma las diez medidas urgentes para defender al maíz y al campo mexicano, con el objetivo de reunir el apoyo de MILLONES de mexicanos y mexicanas.

Participar en la Jornada Nacional de Movilizaciones por la Defensa por Soberanía Alimentaria y la Reactivación del Campo Mexicano, y el Presupuesto Rural 2008 del 12 al 20 de octubre próximo, que incluye una Marcha Nacional por la Salvación del Campo, del Ángel de la Independencia al Zócalo de la Ciudad de México, ferias campesinas, talleres, foros y conciertos.

Realizar actos educativos, de organización y acción de diverso tipo para denunciar los abusos de los monopolios agroalimentarios, y para promover la producción y el consumo nacional de alimentos sanos, orgánicos, sin transgénicos, sin productos chatarra, preferentemente de pequeños y medianos productores y agroindustriales, bajo el sello de Comercio Justo México.

Apoyar los esfuerzos de organizaciones campesinas e indígenas para que las demandas por justicia, salud y soberanía para México, sean escuchadas.


 

Convocamos a todos los mexicanos, hombres y mujeres del campo y de la ciudad para que nos hagamos uno en la histórica tarea de defender al maíz e impulsar un proyecto alternativo para el campo y para el país; un proyecto rural y nacional incluyente, justo, sustentable y solidario.